Características y curiosidades del vidrio de un reloj

El vidrio de un reloj es uno de los objetos más importantes de este accesorio porque proporciona una protección adecuada a la cara principal, que es la que aporta información relacionada con la hora exacta del día. Hoy en día muchos de ellos también ofrecen otros datos gracias a su sistema inteligente.

El avance de la tecnología en materia de relojes ha ampliado considerablemente la gama y modelos de estos accesorios, que van desde los más clásicos hasta los más inteligentes, por lo que su vidrio también ha cambiado en resistencia, forma y materiales, dependiendo de la naturaleza de cada tipo de reloj.  

Para qué sirve el vidrio de un reloj

El vidrio de un reloj, también conocido como bisel, cumpla varias funciones para este tipo de accesorio porque lo cubre de manera adecuada, entre las que destacan las siguientes:

Resistencia a rayas y arañazos

El vidrio de un reloj tiene la particularidad de contar con un nivel de resistencia tal que evita que el roce con algunos elementos le provoque rayas o arañazos que dificultan la visión del usuario.

Esto es algo a lo que está expuesto constantemente ese accesorio, teniendo en cuenta que se utiliza durante todo el día y la noche. En caso de que reciba un arañazo demasiado fuerte, el vidrio se puede dañar de tal manera que puede requerir un reemplazo rápido.

Resistencia a salpicaduras e inmersiones

El vidrio de un reloj puede ser resistente al agua, por lo que evita que pase al interior de la máquina y provoque algún tipo de daño. Existen dos tipos de resistencia: a las salpicaduras y a la inmersión.

Para que un reloj se considere como sumergible debe tener la capacidad para tolerar una presión de 10 ATM como mínimo, ya que de lo contrario es solo impermeable, por lo que solo puede tolerar algunas salpicaduras de agua, nieve o el contacto con polvo.

Todos los relojes sumergibles representan la mejor alternativa para aquellas personas que practican con frecuencia deportes acuáticos como la natación, el buceo, el surf o el kitesurf, entre otros.

Tolerancia a golpes

Otra de las funciones importantes que cumple el vidrio de un reloj es la de resistir algunos golpes no muy fuertes. Dependiendo del diseño, la marca y las funciones que cumple este accesorio será el nivel de resistencia de su bisel, ya que uno tradicional para uso diario no requiere tanta resistencia como uno deportivo, por ejemplo.

Materiales con los que está fabricado el vidrio de un reloj

Dependiendo del tipo de reloj del que se trata, el vidrio o cristal que trae puede ser diferente, por lo que puedes encontrarlo en alguno de estos materiales:

Cristal Zafiro

El cristal zafiro es un vidrio de reloj con una alta resistencia, debido a que el zafiro es uno de los minerales más fuertes que existen. Se obtiene por medio de un proceso basado en la cristalización del óxido de aluminio por medio del sometimiento a temperaturas elevadas.

Esto es un proceso que resulta bastante trabajoso, razón por la cual los relojes que tienen cristal de zafiro tienen un precio más alto. En cuanto al nivel de dureza, que se mide por la escala Mohs, en un rango que va del uno al diez, el zafiro ocupa la posición nueve, demostrando así que tiene una resistencia muy elevada.

Algunos ejemplos de relojes con cristal de zafiro son los siguientes:

Leer más: cristal mineral o cristal de zafiro, ¿con cuál te quedas?

Cristal Plexi

Este tipo de cristal también se conoce como cristal acrílico, orgánico o policarbonato. Asimismo, uno de sus nombres comerciales es Plexiglás (abreviación). Tiene la particularidad de que es uno de los más baratos del mercado, al mismo tiempo que es bastante resistente a las roturas, pero más frágil ante posibles arañazos.

El vidrio de un reloj en cristal Plexi es un plástico transparente que resulta bastante fácil moldear y pulir, razón por la cual no requiere un trabajo muy grande a la hora de incorporarlo en este tipo de accesorio.

Algunos relojes con cristal acrílico Plexi son los siguientes:

Cristal Mineral 

Se trata de un tipo de cristal que también se conoce como vidrio ordinario, el cual es sometido a diferentes tipos de tratamientos basados en el empleo de productos químicos y altas temperaturas, por lo que tiene un elevado nivel de resistencia frente a los arañazos y los golpes a los que se puede someter el reloj con el día a día.

Este proceso se conoce como arena de cuarzo o sílice, en el que se funde primero el cristal, que luego se somete a un enfriamiento controlado, con el que se obtiene un mineral aún más resistente.

Después de obtener el cristal que se desea, se le añaden algunos recubrimientos que bloquean los reflejos que son provocados por la luz, para que el usuario pueda visualizar el reloj de manera adecuada. Incluso en algunas ocasiones se le da un poco de flexibilidad al cristal, cubriéndolo con una capa de iones, que lo hace aún más duro.

Algunos ejemplos de relojes con cristal mineral son los siguientes:

Leer más: ¿cuáles son las partes de un reloj?

Recomendaciones de cristal según el tipo de reloj

Como te dijimos anteriormente, el vidrio de un reloj tiene características específicas que lo hacen idóneo para un tipo específico de este accesorio, que van desde los clásicos, los de diseño, hasta los más robustos o deportivos.

Por ejemplo, para un reloj de diseño, el cristal de zafiro representa una de las mejores alternativas, tanto por el elevado nivel de resistencia que posee, como por la textura y acabado elegante que le proporciona a este accesorio.

En el caso de los relojes más tradicionales, para uso diario, el cristal mineral es una excelente opción porque tiene la particularidad de que tolera bien posibles golpes o arañazos leves, a los que se somete el accesorio en el día a día.

Pero si se trata de un reloj para uso deportivo, sumergible o resistente a salpicaduras de agua, uno de los cristales más idóneos es el Plexi. Cuenta con todas las propiedades necesarias para garantizar seguridad, resistencia y durabilidad a este accesorio que, en su mayoría, puede sumergirse hasta cierta profundidad. Resultando ideal para los deportes en los que el usuario está en contacto con el agua.

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